El pasado mes de junio, como todos los años por esas fechas, he cumplido un año más (29 para ser exactos). Mi cumpleaños fue un sábado para ser más concretos, y ese mismo día después de una copiosa comida familiar, me reuní en el café utopía con el Inge, Aggus y la Felisbertiana para tomar unas cervezas en un ambiente relajado.
En resumen: Un sábado calmado, un poco kitsch y relajante con una cantidad moderada pero razonable de alcohol.
Segunda parte “Mis regalos”
1) Agradeciendo libros.
A la Felisbertiana, por regalarme “Nunca me abandones” de Kazuo Ishiguro, excelente novela que si bien no he tenido tiempo de terminar, he podido disfrutar “a sorbitos” en mis pocos ratos de ocio y que de seguro ocupara un lugar entre mis novelas preferidas.
Al pelador de cebollas, al rabioso sushi, al ahora conocido en los bajos fondos como “Cerebratt” por regalarme “La soledad de los números primos” del Físico, Matemático y escritor italiano Paolo Giordano, una excelente novela que recomiendo ampliamente a todos.
Y por último a mis hermanos “La doctora” y “El inge” por regalarme “El libro de los hombres lobo” de editorial Valdemar.
2) Otros obsequios.
Por último y ya solo para presumir aquí les dejo dos regalos uno de mi abuelita y otro de mi querida señora madre.
Los tenis para correr que desde hace tanto quería.
Y una botella de un excelente tinto Vega Sicilia (púdranse de envidia fanáticos del vino)
Para terminar ya solo puedo agregar que por lo que respecta a la crisis de los 29 años no hubo tal. Y que sí, ya lo sé, no merezco a mi familia y a los maravillosos amigos que tengo.
Gracias por estar siempre a mi lado.
1 comentarios:
Si me pudrirè de envidia.
SALUDOS CARNAL
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